Entrevista realizada y publicada por Diario Concepción. 09 de Diciembre 2023
Defensor de víctimas de violaciones a Derechos Humanos durante la Dictadura evalúa contenido en materia de DD.HH. del nuevo texto constituyente y habla del Plan de Búsqueda.
Tras su participación en la actividad “Seminario Internacional de Derechos Humanos: Crear Para no Olvidar”, realizado en el Teatro Bio Bío, el histórico abogado defensor de familiares de Detenidos Desaparecidos (DD.DD.) durante la Dictadura, Nelson Caucoto, habló con Diario Concepción sobre el tratamiento del concepto de DD.HH. en la propuesta constitucional.
“Es negacionista”, dijo Caucoto sobre el contenido del texto constituyente que será sometido al escrutinio de la ciudadanía el próximo 17 de diciembre.
-¿Cuál es su balance y cómo ha visto vinculado el concepto de Derechos Humano al nuevo proceso constitucional?
Hay muy malas noticias del nuevo proceso constitucional respecto a los Derechos Humanos, porque hay una iniciativa que pretende dejar libres a los violadores de Derechos Humanos que hayan cumplido 75 años, que son la gran mayoría de los presos Punta Peuco, pero se hace por la vía civil, no diciéndolo directamente. Dicen darle la libertad a aquellas personas que tengan 75 años y que tengan alguna enfermedad o algún deterioro en su salud, pero no son capaces de decir que quieren la libertad de los presos Punta Peuco, ahora yo lo decía, y es bueno que el país lo sepa, Punta Peuco ya colapsó y ya llenó su capacidad, también, de acuerdo a un oficio, Colina 1 está igual, que es la otra cárcel alternativa.
-Eso, ¿qué significa?
Que día tras día están cayendo más agentes del Estado condenados por violación de los Derechos Humanos, cuando uno habla en negacionismo, yo tengo ejemplos concretos, es decir, entre agosto y julio, julio y agosto de este año, cayeron 54 agentes del Estado a la cárcel, y eso no salió en ninguno de los medios oficiales, solo en los medios alternativos, entonces eso es negacionismo.
-¿Por qué es negacionismo?
Porque es negar la realidad, negar que se está haciendo justicia, negar que los tribunales están avanzando, negar que aquellos que son autores de estos crímenes están siendo enjuiciados y condenados, y negar eso tiene dos consecuencias, una, que la población no tiene conocimiento de estos hechos y le falta el empoderamiento necesario para no decir, mire, estamos viviendo impunidad, sino que es posible decir, los que cometieron estos crímenes van a ser sancionados y están siendo sancionados, eso tiene que conocer la población chilena para empoderarse en cuanto a sociedad civil. Lo segundo, ¿cuál es la mirada distinta? La mirada que viene, que yo digo, el que se conozca estas noticias de que se están metiendo presos 50 años después a los agentes del Estado, que son fundamentalmente militares, ¿cuál es el mensaje que les llega a los jóvenes que están ingresando a las fuerzas matrices de las instituciones armadas? Que sepan que hay límites que no se pueden traspasar en una sociedad, que no se puede hacer lo que quiera con el adversario que está al frente o con el chileno que está al frente, que eso tiene límites, porque si los traspasan, hasta 50 años después van a ir a la cárcel, ese es el mensaje.
-Entonces…
Hay un mensaje para la sociedad y hay un mensaje para los propios militares, a los que se están formando en la carrera militar, eso fue lo que se hizo, y eso nos sirve como sociedad, nos sirve a todos nosotros como fuerza civilizada, que queremos aspirar a una sociedad más justa, más equitativa, en paz, que no haya venganza. No es venganza, es simplemente el que cometió estos graves crímenes que vaya a la cárcel, eso es todo lo que se quiere. Pero, el proceso constitucional ya viene marcado por su origen. A mí el origen me da desconfianza absoluta, o sea, la población votó porque no intervinieran los políticos.
-¿Qué siente cuando se habla de que quién está en contra de la propuesta constitucional actual, defiende la constitución del 80, la cual tiene un origen de la dictadura?
No, no, no, lo que pasa es que tú tienes que vivir de la realidad, o sea, si hay una Constitución vigente, como esta que es la de Pinochet, si hay que decirlo, esta es la Constitución de Pinochet, es la que está vigente, que ha sido reformada una enormidad de veces. Esta Constitución no puede seguir, no es lo que quiere el pueblo de Chile, vivir con la Constitución de Pinochet. Pero, si tú comparas a esa Constitución de Pinochet, que ha sido sometida a la revisión tantas veces por parte del Parlamento, le han incorporado normas que son positivas, por ejemplo, la desaparición del sistema binominal, la desaparición de una serie de otras entidades que eran mucho más autoritarias. Tener esta Constitución y no tener nada, bueno, obviamente que tienes que quedarte con el mal menor. Prefiero ésta, a la Constitución que hoy día está sometida a Plebiscito. No hay ninguna duda, ninguna duda, porque esta es mucho más retrógrada, es mucho más conservadora. A mí no me gusta la Constitución de Pinochet. Tengo absolutamente claro de que, por ejemplo, repite el principio de subsidiariedad. El Estado sólo puede actuar sólo si los privados no pueden hacerlo, eso no es así, el Estado puede actuar. No quiero tampoco una sociedad estatista, pero quiero que el Estado se comprometa para defender para los que vienen a la fila, o sea, que hay un sistema previsional que inspire también y llame a la solidaridad.
-Pero, en específico sobre tema de Derechos Humanos, ¿Por qué otros motivos usted ve que la propuesta constitucional en negacionista en esta materia?
Si usted la ve y la hojea hoy día, se da cuenta que podría llegar a ser permisiva en caso de que se apruebe. Sí, es negacionista porque coloca cierto límite al tema de la incorporación al derecho internacional, por ejemplo, yo hoy día hablaba de que, si nosotros hemos llegado hasta aquí, a esta altura, habiendo condenas después de 50 años, vivimos en un país en que Chile es la única nación en el mundo que está haciendo justicia después de 50 años. Mira lo que estoy diciendo, es una cuestión súper seria, el único país del mundo, no sólo en América, en el mundo que está haciendo justicia después de 50 años, no hay ningún otro país. Ahora, ¿qué significa eso? Te lo explica el caso Víctor Jara, a la cárcel unos tipos que cometieron el delito hace 50 años, también el caso Paine, un montón de agentes del Estado, el caso de las direcciones clandestinas del Partido Comunista, la dirección clandestina del Partido Socialista. Acabamos de sacar el fallo Bautista van Schouwen, que es de esta zona y del año 73. Eso, el único que lo ha logrado es Chile, ¿y por qué lo ha logrado? Porque aquí impera el Derecho Internacional, con mucha fuerza, porque se han educado los jueces en ese Derecho Internacional, porque esa es la herramienta que le ha dado potencia a los casos, si no existiera, terminamos con la prescripción, con la amnistía.
-Y, eso hace negacionista al texto, según su perspectiva.
Eso viene negado por la nueva Constitución. Eso es lo peligroso, por supuesto, porque si se hace desaparecer el instrumento que te ha permitido el avance, es que no quieren que avance nomás. ¿Cómo logramos nosotros derribar la amnistía, la prescripción, y hacer justicia después de 50 años? Es por el derecho internacional, ese derecho que tuvo preso Pinochet en Londres. Eso sí, a partir de la detención de Pinochet en Londres, se desata la cuestión de la justicia en Chile, ¿por qué? No porque sea Pinochet, sino porque el Derecho Internacional cumplió su papel, un derecho que existía desde antes y que los jueces no lo aplicaban acá, pero hoy día todos los fallos se dictan en base al Derecho Internacional que no permite ni media prescripción, ni prescripción, ni amnistía, ni ninguna otra medida que permita la impunidad, por eso es por lo que es tan potente la acción de la justicia hoy día.
Plan de Búsqueda
-¿Cómo analiza el Plan Nacional de Búsqueda de DD.DD, que impulsado por el Gobierno?
Yo soy optimista, yo creo que sí, que va a tener algún éxito muy relativo, porque a 50 años de distancia es muy difícil obtener información, ya no están ni los parientes, o sea, ni los familiares, no están ni los agentes, no están ni los documentos. No hay nada en este momento, muy poco lo que hay. Pero, a partir de eso yo digo que en la sociedad chilena está diseminada la información, hay que recurrir a los conscriptos y a los agentes del Estado, y hay que recurrir a toda aquella gente que tenga información. Incluso en esta memoria que se resplandece con el paso del tiempo, el tipo que tenía 30, 40 años, el año 73, hoy en día tiene 80, ese tipo quiere morir tranquilo, ese tipo quiere morir en paz, ese tipo quiere entregar la información que tiene y no tiene a quién entregarla. Tienen que ir a él, no esperar que él venga a ti, eso tiene que hacer el Estado con los agentes, hay que ir a Punta Peuco, esos agentes tienen mucha información.
-¿Apelar a lo que lo hicieron y callaron durante 50 años?
Claro, porque nadie ha ido a la puerta, hay que ir.
-¿Pero, cómo, entonces, casi como un favor y apelar a la conciencia?
Apelar a su conciencia y segundo hay que ver qué beneficio puede obtener también, o sea tú no puedes otorgarle impunidad completa. Estoy pensando en (Carlos) Herrera Jiménez, quien ya lleva 30 años preso ya, yo sé que él tiene mucha información, hay que ir a apelar a él y ver qué pasa
-¿Cómo sabe que él tiene información?
Él tiene mucha información, tiene información de Pisagua, tiene información del caso Frei, tiene información. Dice que ha entregado toda la información que tiene, pero yo creo que no lo ha entregado todo. Hay gente que tiene mucha información que no la ha entregado.
-¿Y usted cree que al final de ese camino habrá algo más, un avance respecto de los DD.DD.?
Yo creo que sí. Los agentes ya están fuera de sus instituciones. Una vez se fue donde un agente que entregó toda la información que tenía, y el tipo dijo ¨yo lo estaba esperando usted hace 20 años, y quiero morirme tranquilo, ya quiero morirme en paz, ya no tengo ninguna relación con la institución, la única relación mía con la institución es el cheque que recibo, pero ya nadie me controla, no tengo nada encima”. Habló lo que tenía que hablar, yo creo que humanamente es sano que la persona diga la verdad en algún minuto, los grandes secretos de familia se cuentan en los lechos de muerte y creo que hacen descansar su conciencia, se van tranquilos, se van en paz y hacen un tremendo favor. Imagínense, que un militar diga dónde está el cuerpo de un DD.DD, imagínate el consuelo para los familiares y el descanso que tiene el tipo que tenía una información, que a él no le sirve de nada.
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